Lo más importante para poder practicar Mindfulness correctamente y que sea realmente útil para conseguir todos los beneficios que puedes obtener a través de la práctica diaria es tratar de tomarte el tiempo necesario para que se convierta en un hábito, que puedas hacerlo aunque tan sólo sea unos segundos al día en cualquier situación.
Puedes simplemente hacer un minuto de respiración consciente, o saborear un vaso de agua con plena conciencia, dar un paseo de manera mindfulness, comer con conciencia plena, incluso hacer un escaneo de cómo sientes tu cuerpo en unos instantes...
Esto no te llevará mucho tiempo, no tiene que llegar ni tan siquiera a un minuto si no tienes tiempo, pero te ayudará a cambiar tu perspectiva por un momento y eso hará que los beneficios del Mindfulness se extiendan por todo tu cuerpo y tu mente.
Simplemente es cambiar de perspectiva por un momento.
Es este vídeo te mostramos cómo en unos segundo cambia tu perspectiva:
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